Con el Airchild Six Sixty, J.Rockett ofrece su interpretación del famoso compresor de estudio 660, a menudo considerado el mejor compresor jamás fabricado.
Durante años, los compresores Fairchild 660 y 670 (estéreo) originales han sido imprescindibles para el trabajo en estudio. De ahí la idea de J.Rockett de ofrecer esta firma sonora a los guitarristas de todo el mundo, pero sin pedirles entre 10 y 100 mil dólares como por los originales.
El compresor clásico de los guitarristas es responsable de algunos sonidos icónicos en la historia de la música, especialmente en la escena country. J.Rockett ha observado que ya existen innumerables clones de este circuito legendario pero muy pocos derivados.
El compresor clásico de los guitarristas tiende a aplastar el sonido al estilo de un limitador. Este
comportamiento, que se ha convertido en el sello de ciertos géneros musicales, lo cual no es necesariamente una desventaja, llevó a J.Rockett a crear una pedalera que funcione como un compresor de estudio, mejore la riqueza armónica y suavice los transitorios sin aplastar todo el espectro sonoro.
El Airchild Six Sixty te invita a tocar una y otra vez: aumenta el sustain sin aplastar la señal, enriquece tu sonido global y acentúa la sensibilidad de tu toque. Los sonidos buscados por el equipo de J.Rockett van desde los sonidos de slide de Lowell George hasta las guitarras rítmicas y solistas cantantes de Mark Knopfler.