El uso de los diapasones terapéuticos comenzó en 1550 en Italia, como herramientas de diagnóstico para las afecciones del oído medio o interno. Con el tiempo, la técnica se desarrolló en Inglaterra, Alemania y Francia hacia 1840. Numerosos físicos (Ernest Chladni, Hélène Grimal) mostraron las vibraciones del sonido y su potencia. Se han realizado muchas investigaciones sobre el uso de la influencia de los sonidos en el agua y el cuerpo humano. Los investigadores (renombrados) dedujeron la frecuencia óptima de cada órgano.
Los estuches para diapasones MEINL están diseñados para guardarlos de forma segura cuando no se usan o durante el transporte.