Buen bajo, me sorprendió, sonido infernal.

Por su sonido, este bajo es muy típico de rock o hard rock, y también puede destacar en blues eléctrico o soul "a la antigua". No lo recomendaría a un bajista que busque un instrumento versátil, ya que las dos pastillas son difíciles de mezclar para encontrar un sonido equilibrado. El mástil es muy agradable de tocar, y el instrumento responde bien tanto al uso de la púa como de los dedos. El acabado está muy bien realizado para un instrumento chino. Sin embargo, al tocar de pie, el instrumento se inclina mucho hacia adelante; es un inconveniente común en Gibson y Epiphone, y aunque existen formas de compensarlo, no se puede evitar. El único problema que pasó el control de calidad es que, de origen, los tornillos de ajuste del puente, el alma y la tuerca del selector de pastillas estaban completamente sueltos. Para quienes no saben ajustar su instrumento, recomiendo una visita al técnico nada más recibirlo.

Dos días después de hacer el pedido, mi EB3 fue entregada... finalmente el papel estaba en mi buzón. Tardó tres días más porque el repartidor de Chronopost tuvo algunos "problemas". Ahora intento pasar por empresas privadas como UPS o Fedex, cuyos plazos de entrega siempre se respetan. ¡Soy más partidario del servicio público, pero bueno... Hablemos del aparato: A diferencia de la Epi EB-0, tiene un mástil pegado, como en una Gibson auténtica. Otro "detalle" es que se trata de un bajo de escala larga (a diferencia de la EB-0). El acabado es impecable, el mástil fino, los trastes bien ajustados. Aparte de la forma de la pala y el logo de Epiphone, no veo mucha diferencia con una EB auténtica de la casa matriz. El único inconveniente: tuve que apretar el varitone (selector de pastillas) que estaba un poco suelto en su cavidad. En cuanto al sonido, la pastilla del mástil suena en el registro muy grave. Escuchen "Are you gonna go my way" de Kravitz, es exactamente eso, un sonido sordo y grave pero con dinámica. La pastilla del puente, en mi opinión, es demasiado aguda y estridente (muy cerca del puente), pero mezclada en pequeñas dosis con la pastilla grande del mástil añade claridad y definición al sonido. Tocando rock duro, es exactamente el sonido que buscaba. El sonido es contundente en los graves sin ser invasivo en las otras frecuencias. Se adapta muy bien a un "duro" como yo. Por otro lado, dudo que sea el nirvana para los slap y otros melodistas.

Aparte del hecho de que a Gibson le gusta hacerse desear, este bajo está muy bien hecho, solo falta recibirlo. pero bueno, no es culpa de WoodBrass... sabré esperar.... Daré una segunda opinión sobre las cualidades de este bajo una vez que lo haya recibido

Muy buen bajo, de una gran calidad y a un precio muy accesible!!