Después de usar varias marcas de amplificadores: MesaBoogie Studio 22, Fender Twin, Marshall JCM 900, Marshall JCM 2000, Laney IronHeart 60, BlackStar Studio 50... estaba cansado de transportar equipo pesado y de fiabilidad variable (válvulas)... Tocando en muchos lugares pequeños, escenarios pequeños y algunos grandes, necesitaba un amplificador versátil que sonara bien y tuviera la potencia mínima para rendir en todas las condiciones. Creo que he encontrado la joya. Lo mejor: el sonido: 2 canales, el limpio cristalino que recuerda a Fender y que puede ser cálido para transistor, se puede pasar de un sonido funk a jazz, la dinámica está ahí, el sonido es muy bonito. Acepta muy bien los pedales. El canal saturado: no haremos metal, pero se puede sonar a ZZ Top, Santana o navegar en el jazz fusión. La ecualización es muy usable, los potenciómetros permiten realmente esculpir el sonido. Para los dos canales el sonido es muy potente, con solo un altavoz de 12 pulgadas, es muy muy potente, hay que bajarlo al mínimo para ser usable en pubs. Lo peor: al recibirlo me asusté, los potenciómetros crujían, después de revisar foros vi que otros tenían el problema. Estos crujidos se atenuaron muy rápido, ¿quizás un mal almacenamiento? La reverb regular, usable hasta 2 o 3 luego ahoga el sonido. Conclusión: Un súper amplificador para quienes giran y no tienen roadies que carguen el equipo :) ¡Mi espalda lo agradece! Muy potente. Usable para bailes pop o jazz. Para los rockeros hay otros modelos en la gama. En mi configuración lo microfoneo y no uso la salida de línea.